En ese sentido indicó que la Ley de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca aprobada recientemente, se convierte una oportunidad para el trabajo en pro de las lenguas originarias del estado.
Una de las características de dicha ley es la protección de los derechos humanos de comunidades indígenas, uno de los sectores de población en situación de vulnerabilidad. El uso de una lengua indígena, hoy en día es en Oaxaca, un factor de discriminación, así lo muestra el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) indicó. Para atender la problemática la Defensoría trabajará en la prevención, atención y erradicación de la discriminación y la violencia que sufren las personas por su identidad cultural, y cualquier situación que vulnere la dignidad de la persona. Recordó que uno de los planteamientos de la Ley es garantizar el derecho a traducción y/o interpretación para hablantes de lenguas indígenas. Al mismo tiempo, resaltó la falta de recursos que permitan la salvaguarda de las lenguas pues la entidad registra gran número en diversidad lingüística y población indígena.