Oaxaca, México.-El corazón alegre constituye buen remedio y hace que el resto sea hermoso, pero el espíritu triste seca los corazones. Salomón. La depresión es un severo problema de salud pública en México. Afecta al 12 y hasta el 20 por ciento de la población adulta mayor. Algunas de sus manifestaciones, pueden ser, baja autoestima y estrés crónico, asociados, muchas veces, con problemas económicos, razones por las cuales las personas experimentan ansiedad y tristeza extrema. En una plática, Corina Espinoza Hernández, psicóloga del Inapam, abordó el tema de la psicología en adultos mayores, la depresión y sus características. –Para promover y contribuir a una mejoría de la memoria durante la vejez, es recomendable mantenerlos motivados, ponerles atención, repetir, repetir y repetir, jugar a recordar de manera deliberada y con algunos de estos ejercicios, se les ayuda a no caer en depresión –recomendó. Se calcula que el 15 por ciento de este sector en el mundo padece algún trastorno mental, entre ellos la depresión. Por esa causa, más del 50 por ciento de esas personas recurre a hospitales psiquiátricos, y siete de cada 100 declaran padecer la enfermedad. En México la cifra alcanza a nueve de cada 100 mayores de 60 años. –Los seres humanos son emocionales. Los sentimientos y emociones conforman la afectividad, como un importante ámbito psicológico. Es por eso que la mayoría de adultos que entran a la vejez, comienzan a tener reacciones afectivas negativas, como la depresión –explicó. Añadió que con el paso del tiempo la maduración del organismo, en interacción reciproca con el contexto socio cultural en el que viven los adultos mayores, ocasiona diversos cambios muy complejos, que comprenden habilidades motoras, complicados sistemas de pensamientos, condición y posición ante la sociedad, estrés, e integración socio familiar. –Luego de un examen sobre tipos de aprendizaje, se demostró que las personas mayores, compiten con los jóvenes; tienen mayor capacidad de aprendizaje, lo cual descarta el argumento de que con  la edad, se pierde la capacidad de aprender. –Los seres humanos dependemos de algo o alguien, y lo mismo sucede con la salud mental. Sus trastornos dependen de diversos factores, que pueden mejorar plenamente el interés de la vida de los adultos mayores. Algunos ejemplos son: intereses, formas de intervenir el tiempo, entusiasmo, nuevas estructuras, y no sólo la profesión aprendida en la juventud. –En la vejez crece el manejo adecuado de los afectos, y por tanto, hay mayor madurez afectiva; se experimentan emociones con la misma intensidad que cuando se es joven. También hay evidencia de que la experiencia emocional negativa es más frecuente después de los 60 años. –La mayor parte de los investigadores del mundo afectivo en adultos mayores, concluye que  en la vejez hay más complejidad y riqueza emocional. Según la Organización Mundial de la Salud, (OMS), “Este planteamiento del envejecimiento activo se basa en el reconocimiento de los derechos humanos de las personas mayores, y en los principios de las Naciones Unidas de independencia, dignidad, asistencia y realización de los propios deseos”. –concluyó.